Mascarilla de Noche Sephora - Rose Sleeping Mask y Pearl Sleeping Mask


A veces me encantaría que los días fuesen más largos, que tuviesen 38 horas, para que me diera tiempo a hacer todo lo que quiero, entre otras cosas para poder disfrutar de mis rutinas de belleza preferidas. Normalmente siempre encuentro un hueco a última hora del día para dedicarlo a mí misma, pero otras veces me veo obligada a tomar atajos, a saltarme algunos pasos en pro del descanso o de las prisas. Por este motivo me atrajo mucho la idea de probar las Mascarillas de Noche Sephora (3,95 €) que salieron a la venta hace ya tiempo. Se trata de ocho mascarillas faciales nocturnas en formato monodosis que responden a diferentes necesidades. Las hay hidratantes, tonificantes, iluminadoras, desfatigantes, nutritivas, matificantes...así que es prácticamente imposible no dar con la que mejor se adapte a nuestras exigencias.



Se aplican sobre la piel bien limpia antes de acostarnos y se dejan actuar toda la noche, aprovechando que es la parte del día en que el cutis está más receptivo ante los principios activos. Yo me decidí por la de Rosa, que tiene como función aportar hidratación intensa e iluminar el rosto y la de Perla, que mejora el tono y contrarresta las imperfecciones.

Sephora Rose Sleeping Mask : a base de extracto natural de rosa, tiene una textura fresca y ligera. Después de dejarla actuar toda la noche, a la mañana siguiente la aclaro con agua para eliminar el residuo, y mi piel queda perfectamente hidratada incluso en las zonas donde la suelo tener más seca.



Sephora Pearl Sleeping Mask : una mascarilla al extracto de perla blanca natural que me ha encantado! Extenderla sobre la piel es un placer sublime ya que es efervescente, una cosa muy curiosa la verdad. Yo la uso cuando mi cutis necesita un chute de vitalidad, cuando lo noto apagado o más cetrino de lo habitual. Me deja el rostro luminoso y el tono mucho más rosado.



La idea de tener a mi disposición una línea entera de mascarillas en formato monodosis me gusta muchísimo porque me parece de una practicidad desarmante. Tanto para usarlas  en casa y así aprovechar mejor el tiempo que no siempre nos sobra, como para llevarlas de viaje en lugar de acarrear con botes grandes en nuestro equipaje.

El único defecto que les veo, aunque la verdad es que no es grave, es la cantidad de producto que trae cada envase, bastante generosa, de 8 ml.  Para evitar el desperdicio os aconsejo pasar lo que os sobra a un tarrito pequeño o bien obligar a vuestro novio/marido a someterse a una sesión de belleza con vosotras!